martes, 20 de junio de 2023

 RUTAS POR SEVILLA: Ruta Artística  

Manuel Castillo. 

Manuel Castillo Navarro-Aguilera nació en Sevilla, en el barrio de Nervión, el 8 de febrero de 1930.

Su afición musical se relaciona con su hermana Isabel que era pianista de carrera y su cuñada que también era estudiante de piano.

Comienza oficialmente sus estudios de música en el Colegio San Francisco de Paula, con Antonio Pantión y los continua en el Conservatorio Superior de Sevilla con Norberto Almandoz, que además de profesor era organista y maestro de capilla de la Catedral de Sevilla. Las enseñanzas de este compositor, que había estudiado en Paris y conocía la música contemporánea, fueron una gran influencia para Manuel Castillo.

Posteriormente, en el Conservatorio de Madrid, estudiará piano con Antonio Lucas Moreno y composición con Conrado del Campo y en Paris con Lazare Levy y Nadia Boulanger.

Posteriormente vuelve a España y en 1954 fue nombrado Profesor de Historia y Estética de la Música del Conservatorio Superior de Sevilla, y dos años después Catedrático de Piano y Catedrático de Composición y Orquestación en 1972, puesto que ocupó hasta su jubilación. En este centro fue subdirector y en 1964 fue nombrado Director, tras la dimisión de Norberto de Almandoz, y en 1978 abandonó este puesto de gestión para dedicarse por exclusivamente a la actividad creativa. Durante su mandato revitalizó la Sevilla musical y restauró el viejo edificio dotándolo de un gran auditorio.

Por su vocación religiosa ingresó en el Seminario en 1956, se ordenó sacerdote en 1963 y ejerció como tal hasta 1970. 

Su estilo de compositor ha sido calificado de transvanguardista y de sus obras orquestales destacan las tres sinfonías (1969 y 1992), “Cuatro cuadros de Murillo” (1982), para orquesta de cuerdas, y varias obras concertantes como el “Concierto para dos pianos” (1984).  

Compuso la música oficial de la Exposición Universal de Sevilla de 1992, que le fue encargada en 1986, ampliamente aplaudida en su estreno por la Reina en el teatro Lope de Vega y desdeñada por la clase política de la época por motivos no revelados.

A lo largo de su vida profesional recibió numerosos premios y distinciones.

Premio Fin de Carrera en piano y música de cámara.

1950, Premio Joaquín Turina.

1951, Diploma de Honor en el Concurso Internacional JB Viotti de Italia.

1955, Premio “Jose Salvador Gallardo” del Ateneo de Sevilla.

1959, Premio Nacional de Música.

1962, es elegido Académico Numerario de la Real Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría de Sevilla.

1965, es nombrado Consejero Nacional de Educación.

1974, Insignia de Oro de la Federación Internacional de Juventudes Musicales.

1974, Sevillano de Oro.

1975, Premio en el Concurso Internacional de la Semana de Polifonía y Órgano de Ávila.

1976, SM la Reina le concede la beca “Reina Sofía” y logra el III Premio de Composición Manuel Falla.

1988, es nombrado “Hijo Predilecto de Andalucía”.

1989, Premio Andalucía de Música.

1989, fue nombrado Académico Correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes de Nuestra Señora de las Angustias de Granada.

1990, por segunda vez obtiene el Premio Nacional de Música.

1992, se decide poner su nombre al Conservatorio Superior de Música de Sevilla (ver).

1995, SM el Rey le entrega la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.

1996, Premio de Música Española de la Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero.

Al final de su vida estuvo aquejado de una gran depresión que le impidió seguir realizando su actividad docente. En ello pudo influir el fallecimiento de su hermana Isabel con la que estuvo muy unido, pues realizó el papel de madre al quedar huérfano a una temprana edad. Falleció el 1 de noviembre de 2005 en su ciudad de Sevilla. 

 AREA DE PLAZA DE LA GAVIDIA, CONCORDIA Y DUQUE

Convento-Cuartel del Carmen.

Se localiza en la manzana comprendida entre las calles Baños, san Vicente, Pascual de Gayangos y Goles.

En el siglo XIII esta zona correspondía a una huerta situada intramuros llamada “Huerta de Selim”.

El convento se funda en 1538 sobre unas casas cedidas por el caballero Álvaro Suarez Illescas y un solar colindante donado por Mencía Tello, a cambio de contar ambos con una capilla para su enterramiento en el templo, junto a una capilla para el rey Don Pedro.

El edificio comienza a edificarse en 1428 como “Casa Grande del Carmen”, principal convento de la Orden Carmelita en Sevilla (ver).

Como leyenda, en 1434 durante las obras de cimentación de la iglesia se encontró una Virgen de piedra con un hábito parecido al carmelita y una campanada y posteriormente fue situada en el altar mayor.

Entre 1583 y 1630 se realizó una reforma de ampliación del convento en la que pudo participar el arquitecto Vermondo Resta, que en esas fechas era el Maestro Mayor del Arzobispado, y que permitió que en 1664 hubiera hasta cien frailes en el convento.

Durante la Guerra de la Independencia, la invasión francesa, como ocurrió con otros conventos e iglesias, provocó que los monjes carmelitas fueran obligados a abandonar la Casa Grande del Carmen, sus bienes expoliados, las hermandades expulsadas y el edificio reconvertido en cuartel para alojamiento de las tropas francesas.    

En 1812, tras la Guerra de la Independencia, regresaron unos treinta frailes, se realizaron obras de restauración y la iglesia se abrió de nuevo al culto en 1815.

Pero, en 1835 con la desamortización de Mendizábal, los religiosos volvieron a ser expulsados, el convento fue convertido en Cuartel de Infantería (Cuartel del Carmen), Hospital provisional y posteriormente en “Caja de Reclutamiento”, hasta que fue abandonado en 1978.

En 1984 el edificio fue comprado por el Ayuntamiento de Sevilla para instalar la Gerencia de Urbanismo, pero en 1990 fue adquirido por la Junta de Andalucía para reconvertirlo en sede del actual Conservatorio Superior de Música, con el nombre del músico Manuel Castillo (ver), gracias a la cofinanciación de fondos Feder de la Unión Europea. Fue inaugurado el 24 de enero de 2002 por el Eximo seños Presidente de la Junta de Andalucía Don Manuel Chave y es visitable, en determinadas fechas, los patios, el claustro principal y la gran escalera.

El movimiento religioso y social del siglo XVI condicionó el nacimiento de las hermandades en la ciudad y su utilización del Convento del Carmen:

En 1500, en este Convento se fundó la Hermandad del Sagrado Descendimiento de Nuestro Señor Jesucristo, germen de la Hermandad de la Quinta Angustia, actualmente con sede en la Iglesia de la Magdalena (ver).

A mediados del siglo XVI se fundó, en la Iglesia de san Vicente, la Cofradía de los Sagrados Clavos de Nuestro Redentor Jesucristo, Sagrado Corazón de Jesús, Nuestra Señora de los Remedios y san Juan Evangelista, que se trasladó a este Convento Casa Grande del Carmen y en el siglo XVII se unió con la Hermandad de Nuestra Señora de la Cabeza y San Zoilo, fundada en dicho convento en 1561, constituyéndose la actual Hermandad de las Siete Palabras y la Virgen de la Cabeza, con sede en la Iglesia de san Vicente (ver).

En el año 1575, la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad se instala en una parcela cercana al Convento casa Grande del Carmen, edificando una capilla, una sacristía y una Sala de Cabildo. En 1594 la capilla fue agregada a la Archibasilíca de san Juan de Letrán de Roma y en su Altar Mayor se instaló una escalera de 28 escalones con la que se obtenían las mismas indulgencias que en la Escalera Santa. Actualmente su sede se sitúa en la Iglesia de san Lorenzo (ver).

Calle Goles s/n

Calle Goles s/n

La Casa Grande del Carmen también se relaciona con Jesús de las Penas, actualmente en la iglesia de san Vicente (ver), que perteneció a la orden Carmelita y recibía culto en el convento. 

El edificio, que forma parte de la Ruta de Murillo, es de planta rectangular con fachadas de unos 50 metros de longitud y unos 115 metros por los lados interiores, con una superficie aproximada de 5.900 metros.

Placa conmemorativa de 400 años de Murillo, situada en el suelo ante la puerta de entrada

Visión de la calle Baños

Su morfología actual depende de dos aportaciones. En primer lugar, el convento de Carmelitas Calzados de finales del siglo XVI y comienzos del XVII, basado en el esquema generado en Cluny en el siglo X, y en segundo lugar la reconversión en cuartel en el siglo XVIII y XIX que provocó la apertura de un eje longitudinal que recorre todo el edificio.

La fachada principal, a la calle Baños, es resultado de la reforma del siglo XIX que sustituye la antigua tapia y portalón del primitivo Convento. 

Sobre el gran portalón de entrada existe un balcón con una baranda corrida de fundición y dos vanos rectangulares, coronado por un entablamento rematado por un frontón triangular. Esta limitado por dos guardas esquinas metálicos.

Fachada de la calle Baños

Entrada por la calle Baños

Tras el portalón de entrada se accede a un zaguán que da paso al primer patio o compas del recinto conventual, que ha sido cerrado con un techo acristalado. En las paredes varios cuadros de autor desconocido. En este espacio hay dos escaleras laterales y sendos patios interiores y al frente un corredor que da entrada al claustro principal. 

Primer patio. Al fondo el claustro principal

Lateral izquierdo del primer patio con una escalera al fondo




El claustro principal, del siglo XVI y principios del XVII, es de planta cuadrada con dos alturas.

El cuerpo bajo presenta pilares de planta rectangular, decorados con pilastras de orden toscano, y sobre ellos un entablamento clásico. Entre los pilares se abren vanos de medio punto con dovelas y jambas remarcadas.

El piso superior presenta pilastras sobre pedestales con escueto entablamento y ventanales con frontón partido de carácter manierista. 

Entrada al claustro principal

Claustro principal

Claustro principal

Claustro principal con detalle de la torre

Las galerías se cubren con bóvedas de aristas, decoradas con yeserías   de diseño geométrico, de arquitectura tardo renacentista.

Las dependencias que se encuentran en las galerías del claustro fueron adaptadas a las necesidades de la nueva ocupación como cuartel.

Galerías con bóveda

Galerías con bóveda

En el ángulo sureste de claustro se ubica la escalera principal. El acceso a ella presenta dos arcos de medio punto, sobre cuatro columnas apoyadas en un pedestal corrido. Su construcción es posterior a la edificación del claustro y sigue el modelo imperial español.

Acceso a la escalera

Tras el claustro principal existe otro patio más pequeño que presenta dos pisos con arcos de medio punto sobre columnas toscanas, enjutas decoradas y ménsulas en las claves. Durante la transformación en cuartel se añadió un tercer piso con diseño más simple pues solo presenta ventanas entre pilastras.   

Patio secundario (ver)

En cuanto a la iglesia, en el siglo XIX, se demolió una parte importante del templo y se sustituyó por un conjunto de dependencias.

En el ángulo sureste, entre la iglesia y el claustro principal, se levanta la torre, ahora desmochada. Ésta puede datarse por su tipología en el siglo XVII, aunque sufrió reformas en su decoración durante el siglo XVIII. Muy difícil de fotografiar dada la estrechura de la calle baños. 

Torre desmochada; en primer término, la cubierta a cuatro aguas de la escalera.

La torre de la iglesia del convento del Carmen lleva años cerrada / JUAN CARLOS VÁZQUEZ

En todas sus vicisitudes muchas de las obras de arte del convento desaparecieron o cambiaron de lugar:

En la Iglesia de san Lorenzo se conserva una Virgen del Carmen del siglo XV y la Virgen de la Soledad, anónimo del siglo XVI (ver).

En la iglesia de san Vicente, el Cristo de las Penas, anónimo de 1700 (ver).

En la iglesia de santa María Magdalena, el Cristo del Descendimiento de Pedro Roldan de hacia 1659.

En la Iglesia del Buen Suceso, de la orden carmelita, el cuadro de la “Aparición de la Virgen del Carmen a los carmelitas del convento de Bravante”, obra de 1745 aproximadamente.

En el convento de Santa Ana, La visión del profeta Elías, atribuido a Juan José de Uceda, hacia 1745 (ver)

En la Galería Nacional de Londres, La Inmaculada Concepción y San Juan Evangelista en Patmos, de Diego de Silva y Velázquez. 

En el Palacio Pitti de Florencia, La Virgen con el Niño de Bartolomé Esteban Murillo, hacia 1650-1655.