martes, 29 de agosto de 2023

RUTAS POR SEVILLA: Vírgenes

Virgen de los Desamparados. 

El 24 de febrero de 1409 el padre Jofré se dirigía a la catedral de Valencia para pronunciar un sermón de una misa durante la Cuaresma, cuando presenció el maltrato de un enfermo mental en una calle próxima a Santa Catalina (actual Martín Mengod, anteriormente llamada Platerías).

Un grupo de jóvenes golpeaba y se burlaba de un hombre perturbado, al que gritaban «¡al loco, al loco!», de acuerdo con la entonces muy extendida creencia de que los locos eran posesos del demonio.

Se interpuso entre los agresores y el agredido, protegió al hombre y se lo llevó a la residencia mercedaria, donde le dio cobijo y dispuso que le curasen las heridas.

El domingo siguiente en la catedral, dedicó una parte de su sermón a predicar en contra de “la persecución irracional y tanto más cruel cuanto más inocentes, impotentes e irresponsables son las víctimas”, y concretó que  “Estas cosas son conocidas de toda la ciudad de Valencia, por eso sería una cosa y obra muy santa que Valencia construyera un albergue u hospital en el que tales locos e inocentes estuviesen de tal manera que no deambulasen por la ciudad y no pudieran hacer ni recibir daño."

El sermón fue escuchado por Lorenzo Salom (o Saloni), quien junto con otros comerciantes y artesanos aportaron los fondos necesarios para su materialización. Poco después, el Consejo General de la Ciudad aprobaba la iniciativa.

El asilo se ubicó en lo que había sido una casa con huerta en las afueras de la ciudad, cerca de la puerta Torrent, que pasó a ser conocida como la “Puerta de los Locos”.

El 1 de junio de 1410 se inauguró el hospital con el nombre de "Hospital d’Innocents, Follcs i Orats" bajo el amparo de la Virgen, Sancta María dels Innocents. El vulgo enseguida le llamó "Hospital de Nostra Dona Santa María dels Innocents". 

La hermandad se constituyó bajo la advocación de "Nostra Dona Sancta Maria dels Folls, Innocents e Desamparats" (Nuestra Señora Santa María de los Locos, Inocentes y Desamparados). 

El objetivo de la hermandad era atender a los enfermos, y debido a la hambruna de la época y el gran índice de orfandad, las calles se encontraban numerosos niños desamparados, por lo que el hospicio se amplió para recoger a los niños desamparados, locos, expósitos y abandonados.

El año 1414 llegaron cuatro jóvenes, vestidos de peregrinos, a la cofradía. Al recibirles el hermano cofrade que vivía en la casa, cuya esposa era paralítica y ciega, le dijeron que en dos días les podían hacer una imagen de la Virgen si les daban un lugar donde hacerlo y comida. Les llevaron al lugar conocido como La Ermita.

Pasados cuatro días y no oyéndose ningún ruido, forzaron la puerta y encontraron la imagen de la Virgen María. Los extraños peregrinos habían desaparecido; poco después sanó la esposa del miembro de la hermandad, ciega y paralítica. El suceso dio origen a la leyenda de que "la feren els àngels" (la hicieron los ángeles).

En 1416 el rey Alfonso V el Magnánimo autoriza “que la imagen de la Virgen María que se construya como titular de la referida entidad pueda llevar acomodados entre los pliegues de su túnica a dos inocentes de los sacrificados por Herodes”.

El 21 de abril de 1885, el papa León XIII concedió una Bula pontificia por la que nombraba patrona de Valencia a la Virgen de los Desamparados.

Iglesia de san Vicente.

A los pies de la nave del Evangelio de la iglesia de san Vicente, vemos un retablo neoclásico procedente del Convento Casa Grande del Carmen (ver), restaurado en 2007, que contiene la imagen de la Virgen de los Desamparados.


Retablo de la Virgen de los Desamparados

Es una imagen de candelero, bella réplica de la Patrona de Valencia realizada por el escultor Gilabert a finales del XIX. 

Fue traída a Sevilla a finales del siglo XIX por el cardenal Sanz y Forés, arzobispo de Sevilla entre 1889 y 1895, que era natural de Gandía (Valencia).

Preside una Asociación Cultural, fundada en 1889, de valencianos radicados en Sevilla, que obtuvieron permiso para la fundación de la Cofradía del entonces arzobispo de Sevilla, el anteriormente mencionado don Benito Sanz y Forés. 

La Asociación de Fieles de Ntra. Sra. de los Desamparados celebra misa con Salve e Himno a su Patrona los terceros sábados de mes y, por su íntima vinculación con la Casa Regional Valenciana, organiza también numerosas actividades culturales relacionadas con Valencia.

La imagen presenta el rostro muy inclinado hacia adelante ya que la primitiva posición de la patrona de Valencia era yacente (su cabeza reposaría entonces sobre una almohada) y este detalle ha pasado a todas las copias.

Como atributos iconográficos lleva un ramo de lirios y la cruz del Niño que simbolizan la inmaculada pureza de la Virgen María y la corredención del humano linaje.

A los pies están las figuras de los Inocentes que son el emblema de la advocación, pues están de rodillas “amparados” por el manto de la Señora.

Virgen de los Desamparados

Detalle de la Virgen de los Desamparados

Detalle del Niño

Detalle del ramo de lirios

Detalle de los Inocentes tapados por el manto de la Señora.

Iglesia de san Andrés

En la cabecera de la nave del Evangelio se halla un retablo de estilo barroco realizado en madera con las técnicas de tallado, ensamblado y dorado, por un autor desconocido de finales del XVIII. Mide 6,42 metros de alto por 2,85 metros de ancho.

El retablo presenta una hornacina entre estípites, presidido por una magnífica talla de una Dolorosa que está documentado que fue realizada por Benito Hita del Castillo en 1670.

Aparece arrodillada sobre un cojín, con un enorme corazón traspasado por el puñal de dolor en el pecho. Sus devotos del templo de San Andrés también la conocen como "Virgen de los Desamparados". 

La talla de madera fue realizada mediante las técnicas de estofado, policromado y dorado y su altura alcanza los 1,25 metros.

Retablo

Virgen de los Desamparados

 RUTAS POR SEVILLA: Vírgenes

Virgen de la Cabeza de Gloria. Iglesia de san Vicente.

En el lado de la epístola de la Capilla Sacramental de la Iglesia de san Vicente, encontramos el retablo de la Virgen de la Cabeza. 

La imagen es una obra completa realizada por Roque Balduque en 1554.  En el ático, Santa Catalina de Alejandría.

Pertenece al grupo de imágenes conocidas como Vírgenes erguidas, en contraposición a las Vírgenes sedentes, que eran más comunes en siglos anteriores.

En la Virgen de la Cabeza se pone de manifiesto la dulzura maternal de la Virgen con que mira al Niño que lleva en el brazo izquierdo, mientras que en la cara del Niño se dibuja una sonrisa abierta.

Este tipo de Virgen con el niño en brazos alcanza en Roque Balduque una belleza singular.
Destaca los sinuosos drapeados de los pliegues curvilíneos y verticales.

Retablo de la Virgen de la Cabeza


Imagen de la Virgen de la Cabeza

Detalle del rostro de la Virgen y del Niño

La Virgen de la Cabeza de Andújar, en 2009 durante la celebración de su   Año Jubilar fue condecorada con la “Rosa de Oro” (“singular privilegio”) por el Papa Benedicto XVI como reconocimiento del Patronazgo sobre la Diócesis de Jaén y la amplia historia de su romería, la más antigua de España.

Esta distinción fue creada por el Papa León IX en 1049, para reyes y dignatarios, después casi exclusivamente para reinas y últimamente para imágenes marianas. En España la Virgen de la Cabeza es la única imagen que tiene este reconocimiento Papal.


Detalla de la "Rosa de Oro" en la mano derecha

 RUTAS POR SEVILLA: Vírgenes

Virgen de la Cabeza Dolorosa. Iglesia de san Vicente.

La Hermandad de Nuestra Señora de la Cabeza es una Hermandad de Gloria fundada en 1561 en el convento Casa Grande del Carmen, en la calle Baños (ver).

A pesar de su titulación similar a la del santuario de Andújar (Jaén), no fue filial de la cofradía matriz de esa localidad, aunque sí celebraba sus mismas fiestas (procesión el sábado anterior al último domingo de abril) y por sus reglas se conoce que se inspiró en aquella. 

En 1629 se fusiona con la cofradía de los Sagrados Clavos y Virgen de los Remedios, que empezaría a denominarse como la de las Siete Palabras. 

En el año 1956, la Hermandad de las Siete Palabras celebraba su 400º aniversario fundacional. Con motivo de esta celebración, la junta de gobierno decidió recuperar la advocación de Nuestra Señora de la Cabeza, en torno a la cual se fundó la Hermandad.

Se designó a Manuel Escamilla para su ejecución, pero no como una talla nueva, sino que se dispuso aprovechar la remodelación de un ángel de Emilio Pizarro, del misterio del Sagrado Corazón de Jesús, que nunca llegó a recibir culto, a excepción de utilizarse en el belén de la parroquia de San Vicente.

El 30 de diciembre de aquel año fue bendecida por el cardenal Bueno Monreal.  

En el año 1958 fue incorporada al cortejo procesional como segundo paso.


En 1978, el propio imaginero le hizo un nuevo juego de manos, y en 2008 fue restaurada por Pedro Manzano.

En 2002 se planteó sustituir esta talla, de discreta calidad artística, por otra del Prof. Miñarro de 1991, que recibía culto en la parroquia de san Isidoro, pero finalmente esta propuesta fue desestimada.

Actualmente se sitúa en el retablo del lado del evangelio de la capilla Sacramental en cuyo ático existe una hornacina con una pequeña figura de san Ramón Nonato.  

Retablo en la Capilla Sacramental

Virgen de la Cabeza




Detalle del rostro de la Virgen de la Cabeza

La Virgen de la Cabeza de Andújar, en 2009 durante la celebración de su   Año Jubilar fue condecorada con la “Rosa de Oro” (“singular privilegio”) por el Papa Benedicto XVI como reconocimiento del Patronazgo sobre la Diócesis de Jaén y la amplia historia de su romería, la más antigua de España.

Esta distinción fue creada por el Papa León IX en 1049, para reyes y dignatarios, después casi exclusivamente para reinas y últimamente para imágenes marianas. En España la Virgen de la Cabeza es la única imagen que tiene este reconocimiento Papal.

 

Detalle de la "Rosa de Oro" en la mano izquierda

 RUTAS POR SEVILLA: Vírgenes

Virgen del Rosario. Iglesia de san Vicente.

Presidiendo el retablo de la capilla Sacramental de la iglesia de san Vicente, se da cultos a la Virgen del Rosario, de Cristóbal Ramos, siglo XVIII, titular de la Hermandad Sacramental, y situada encima del Sagrario.

Esta imagen presenta la dulzura de las obras de Cristóbal Ramos, con la mirada hacia abajo dirigida al pequeño Niño que lleva en su brazo izquierdo, mientras que en la mano derecha lleva un cetro de plata.

Altar Mayor de la Capilla sacramental

Virgen del Rosario


Detalle del cetro en la mano derecha y el Niño en la izquierda

Detalle del rostro de la Virgen y el Niño