ALGUNOS PERSONAJES HISTÓRICOS EN LAS CALLES DE SEVILLA
Rubens, Pedro Pablo.
Rubens nació en Siegen provincia alemana de Westfalia
el 28 de junio de 1577, en el territorio del Sacro Imperio Romano Germánico.
Previamente su familia se había establecido en
Amberes, en una época de gran actividad económica y artística con frecuentes
convulsiones políticas y religiosas pues no todos aceptaban ser súbditos de la
católica España.
Por cuestiones religiosas (su padre era abogado calvinista y su madre protestante), su familia se vio forzada a abandonar Amberes para residir en la ciudad de Colonia en 1568, cuando el duque de Alba estaba a cargo de los Países Bajos de los Habsburgo.
En esta ciudad Jan Rubens, padre del artista, se convirtió en asesor legal y amante de la segunda esposa de Guillermo I de Orange, Ana de Sajonia, por lo que fue acusado de adulterio por lo que tuvo que pasar una temporada en la cárcel; posterior a su liberación es obligado a residir en Siegen, donde tras reconciliarse con su esposa (María Pypelincks) nace su sexto hijo Peter Paul Rubens en 1577.
En 1589, después de la muerte del padre, regresan
nuevamente a Amberes. Para esa época y por decisión de la madre, la familia se
convirtió al catolicismo lo cual influyó profundamente en la vida del joven
artista.
A la edad de catorce años (año 1591) inicia
formalmente el estudio de pintura en el taller del paisajista Tobias Verhaecht,
continuando su formación, hasta los veinte años, con Otto van Veen.
En 1589 ingresa en el gremio de San Lucas de Amberes
como maestro independiente,
En 1600, al cumplir 23 años, se marchó a Italia, pasó los primeros cuatro años en Venecia, donde fue influenciado por las obras de Tiziano y Veronés, y allí permaneció al menos ocho, entrando al servicio del Duque de Mantua y recorriendo los principales centros artísticos italianos, copiando obras maestras para la colección de su mentor el duque de Mantua, estudiando las obras más importantes de los maestros italianos del Renacimiento como Rafael, Miguel Angel, Caravaggi, Carraci etc.
Durante este periodo italiano
produjo sus primeras obras como “la Exaltación de la Cruz” y “El bautismo de
Cristo”.
En 1603 realiza su
primer viaje a Madrid por encargo del duque de Mantua, para llevarle unos
presentes a Felipe III y a su vuelta a Mantua, al año siguiente, fue
nombrado pintor de cámara de Vicenzo Gonzaga.
En el año de 1608, regresó a Amberes debido a la enfermedad de su madre. Se radica en esta ciudad y en 1609 fue nombrado pintor de la corte del archiduque Alberto y la archiduquesa Isabel, gobernantes del sur de los Países Bajos, y contrae matrimonio con Isabela Brant, la joven con la que se representó en su primer autorretrato en la Pinacoteca de Múnich y con la que tuvo tres hijos Clara Serena, Alberto y Nicolás.
En 1628 viajó de nuevo a España, en misión diplomática, y también visitó Inglaterra y Holanda. En este segundo viaje, conocerá al otro grande del barroco, Velázquez, con el que entabló gran amistad. Felipe IV se interesó especialmente por su obra e incluso después de su muerte y adquirió múltiples pinturas que actualmente son parte del Museo Nacional del Prado.
Fue nombrado caballero
tanto por Felipe IV de España como por Carlos I de Inglaterra, y ambos
gobernantes valoraron mucho sus habilidades diplomáticas.
También desarrolló importantes obras de arte para la
monarquía francesa. Marie de Medici, reina de Francia, encargó a Rubens la
confección de una serie de pinturas alegóricas a su reinado y al de su
fallecido esposo, Enrique IV. Este trabajo lo concluyó en 1625 y se conoce como
“Ciclo de Marie de Medici”.
Con más de 50 años, tras la muerte de su primera
esposa, se casó en 1630 con Helen Fourment, que sería su modelo en sus ultimo
diez años.
En 1640, luego de varios años de retiro, Rubens
fallece en la ciudad de Amberes a la edad de 63 años.
Rubens colaboró con diversos
artistas como Jan Brueghel o Frans Snyders y abrió en Amberes una casa-taller
con tal éxito que en ocasiones se vio obligado a rechazar centenares de
aprendices de pintura, pero en ella se formaron principales artistas como Rubens y Anthony Van Dyck.
El disponer con la colaboración de numerosos ayudantes
especializados, le permitió ejecutar gran número de obras en respuesta a la
multitud de encargos que recibía, abarcando temáticas diversas, como religión,
mitología, historia, asuntos profanos… en ocasiones en grandes series de
lienzos de proporciones notables. Así, junto a las pinturas que realiza por sí
mismo o con escasa colaboración, hay que destacar aquellas en las que se limitaba
a dibujar la composición, indicar los colores y dar toques finales, confiando
su ejecución a colaboradores, al disponer de discípulos especializados en
paisajes, animales, frutas o flores, de modo que cada uno ejecutaba en el
lienzo la parte de su competencia. De este modo se constata la existencia de
1403 cuadros verificados y otros tantos que se produjeron bajo su supervisión
en su taller.
Andrómeda y Perseo. Peter Paul
Rubens. 1639/1641. Óleo sobre lienzo. 223x163. Museo del Prado