EXPOSICIONES
Estudiantes. Cien años de Hermandad.
La historia de una Hermandad no puede
quedar reducida a la narración de unos acontecimientos históricos, porque una
hermandad no es nada sin los que la conforma, sin aquellos que la construyeron día
a día, por eso es necesario reivindicar su esfuerzo, su dedicación, su trabajo,
su empeño en alcanzar que, después de cien años, seamos herederos de este
legado que nos dejaron en forma de Hermandad.
UNA MIRADA ATRÁS.
Corría el año 1619 cuando el Padre Pedro
de Urteaga fue nombrado propósito de la casa profesa de la compañía de Jesus,
encargando a un joven imaginero cordobés, afincado en Sevilla, Juan de Mesa y
Velasco (ver), la imagen de un Cristo crucificado y muerto.
El 8 de septiembre de 1620, de un trozo
de madera de cedro emerge la imagen serena y dulce de Cristo muerto en la cruz,
manifestando el silencio y abandono inapelables de la muerte.
Documento
hallado en el interior de la imagen:” Ego, Joanes de Mesa, feci, A.D. (Anno
Domini) de 1620” (Yo, Juan de Mesa, lo hice en el año del Señor de 1620)
Documentos que se
encuentran adheridos en el interior del torso de la imagen.
Escritura de concierto del Crucificado celebrada entre el
padre Urteaga y Juan de Mesa, ante el escribano Gaspar León, en 13 de marzo de
1620, obrante en el Archivo de Protocolos Notariales de la ciudad (ver).
Concesión de distintos títulos a la Hermandad por S.S.
Papa Pio XI.
Portada del diario ABC de Madrid, publicado en noviembre
de 1924, dando cuenta de la fundación de la Hermandad.
D. Feliciano Candau y Pizarro, primer Hermano Mayor
(1924-1927)
D. José Mariano Mota y salado (Primer Teniente Hermano
Mayor). En nombre del Claustro Universitario juró las primeras Reglas de la
Hermandad el día 17 de noviembre de 1924, ante el Cardenal Illundain.
El 7 de noviembre de 1924, presididos por la imagen del
Stmo. Cristo y en presencia del arzobispo Dr. D. Eustaquio Ilundai y Esteban,
se dio lectura al decreto de aprobación de las Reglas de la nueva Hermandad,
jurando sobre los Evangelios, el vicerrector D. José Mariano Mota y Salado, en
nombre del claustro Universitario, haciendo lo propio el Secretario D. Luis
Palomo Rodríguez, en representación de todos los demás hermanos.
Los años difíciles
En la década de los años treinta, la Hermandad no permaneció al margen de los graves y tristes acontecimientos vividos en la ciudad después de la proclamación de la Segunda República.
El
cierre de la iglesia de la Anunciación durante tres años (1932-1935), con las
imágenes titulares en su interior, provocó momentos de amargo recuerdo.
Altar en el interior de la Anunciación. Hacia 1885 ¿???
El cambio de sede
En la noche del sábado 26 de noviembre
de 1966, la Hermandad iba a cerrar la página de su historia en la iglesia de la
Anunciación, donde había sido fundada hacia cuarenta y dos años, iniciando un
nuevo periodo en la nueva sede de la Universidad en la calle san Fernando.
D. José Carlos Ramos Rubau (Hermano Mayor 1963-1971).
Durante su mandato se consumó el traslado de la sede de la Hermandad en la
noche del 26 de noviembre de 1966.
Diversos momentos del traslado de las Sagradas Imágenes
en la noche del 26 de noviembre de 1966.
Los Hermanos Honorarios
La distinción como Hermano Honorario ha
respondido siempre al reconocimiento de la Hermandad a diversas personas e
instituciones que prestaron servicios extraordinarios a la misma.
Reproducción del título de Hermano Mayor Honorario de D.
Luis Ortiz Muñoz, que le fuera concedido el 15 de enero de 1944.
S.A. el príncipe D. Carlos de Barbón-Dos Sicilia y
Orleans, Hermano Mayor Honorario en la primera junta de Gobierno nacida el 17
de noviembre de 1924
S.E. Rvdma. Dr. D. Eustaquio Ilundain y Esteban,
arzobispo de Sevilla, que presidió el Cabildo fundacional de la Hermandad en
1924
D. Luis Ortiz Muñoz (en el centro de la imagen), desde su
presencia en el Ministerio de Educación. Fue figura clave en la década de los
años cuarenta, por los distintos retos que la Hermandad tuvo que afrontar.
El Cabildo Catedralicio, nombrado Hermano de Honor en
1972, con motivo del inicio de los cultos cuaresmales en la Catedral
Los Hermanos Costaleros
El Martes Santo, 17 de abril de 1973,
la Hermandad iba a protagonizar una de las páginas más importantes de su propia
historia y de la historia de las cofradías de Sevilla: La llegada de los
hermanos costaleros a la Semana Santa sevillana.
El periodista de ABC, Benigno González,
en su crónica del día siguiente, escribiría: “Será también necesario que quede
registrada su conmovedora cruz; un reverso de arrastrar alpargatas
sincronizadas, de anonimato entre sudor y polvo, de andar sin mirar a parte
alguna, humillada la cabeza bajo la trabajadera, y avanzar como movido por un
misterioso poder, llevando al Señor muerto en su Buena Muerte”.
Diversas fotografías de los momentos vividos el Martes
Santo de 1973
En reconocimiento a su labor, este azulejo preside la
Sala Capitular de la Hermandad desde 1981
D. Ricardo Mena-Bernal Romero (Hermano Mayor 1971-1982),
fue el patrocinador de la idea surgida de José Luis Amoscótegui Gil, de
creación de la primera cuadrilla de hermanos costaleros en la Semana Santa sevillana.
Al termino del mandato de D. Ricardo Mena-Bernal, se hizo
cargo de la Hermandad el Teniente Hermano Mayor D. Javier Molina Orta (Hermano
Mayor 1982-1983)
Todos los antiguos
Hermanos Mayores, en el momento del acto de entrega de la Medalla de la
Universidad
D. Antonio Piñero Piñero (Hermano Mayor 2008-2016) que
recibió la Medalla de La Universidad durante su mandato
El Cabildo de la Santa, Metropolitana y Patriarcal
Iglesia Catedral de Sevilla, otorgó carta de hermandad, siguiendo antigua y
venerable tradición eclesial entre las comunidades de Fe y Amor a Cristo
Nuestro Señor y Redentor.
En la tarde del Martes Santo de 1979, durante la Estación
de Penitencia, se formalizó el Hermanamiento al paso de la Cofradía por la
Catedral
El Pregón Universitario ha sido cantera de futuros
pregoneros de la Semana Santa de Sevilla, como es el caso de D. Juan Moya
Sanabria, pregonero universitario en 1976 y, siendo Hermano Mayor (1983-1991),
fue también designado pregonero de la Semana Santa de la Ciudad en 1989.
Chema Rodríguez. 2007. Óleo sobre lienzo. 84 x 61
Daniel Bilbao.
1989. Óleo sobre tabla. 73 x 50
Joaquín Castilla y Romero. Lápiz y acuarela
Ricardo Suarez López. 1994. Óleo sobre tabla. 73 x 50
Daniel Bilbao Peña. 2020. Óleo sobre tela
D. Salvador Diánez Leal (Hermano Mayor 1959-1963), en
cuyo mandato se contrataron y ejecutaron todas las jarras del paso.
Jarra entre varal, en plata de ley. Orfebre, Emilio García
de Armenta. 1963
Calvario del centro del respiradero frontal. Orfebre
Emilio García de Armenta. 1948. Plata de Ley
Detalles del techo del palio de la Santísima Virgen de la
Angustia. Taller de Esperanza Caro, 1958
Diversos momentos del bordado de varios de los elementos
del “paso”, tanto en el taller de Esperanza Elena Caro, como en el taller de
bordados de Santa Bárbara, durante el proceso de bordado del manto procesional
terminado en el año 2005.
Fotografía de González Nandin tomada el 24 de abril de
1924
En 1925 se iniciaron gestiones, que no fructificaron, con
la Hermandad de la Quinta Angustia para la adquisición de esta Dolorosa que,
atribuida a Martínez Montañés, se venera bajo la advocación de la Encarnación.
(Cedida para la exposición por la Hermandad de la Quinta Angustia)
Detalles de la Dolorosa
Las imágenes de la Virgen
La advocación de María Santísima de la
Angustia aparece en el titulo fundacional de la Hermandad, por lo que, desde
ese primer momento, se sintió entre los hermanos, la necesidad de contar con
una imagen de la Santísima Virgen que viniera a cubrir el hueco existente.
Nuevo “Paso” para
el Santísimo Cristo de la Buena Muerte. Idea y dibujos originales: Antonio Gutiérrez
de la Peña. Dibujos para el taller: Jose Manuel Ramos. Orfebrería: Taller de
los hermanos Pedro y Jose Manuel Ramos. Carpintería: Tallista Oscar Caballero. Tallas
en los respiraderos: Miguel Ángel Domínguez, y en el canasto de Manuel Téllez. Escena
central de la Anunciación: Guillermo Martínez Salazar. Bordados de los
faldones: Taller santa Bárbara
Santísimo Cristo de la Buena Muerte (ver)
Imagen de la Santísima Virgen, de autor desconocido, que
en los primeros años acompañaba al crucificado en su altar de culto, junto a
una imagen de san Juan, hoy desaparecida. (Cedida para la exposición por la
Universidad de Sevilla)
Detalle del rostro
Imagen de san Juan Evangelista, obra de Antonio Bidón,
perteneciente en su día a la Hermandad, hasta su adquisición por la Hermandad
de la Vera Cruz de Olivares, el día 11 de septiembre de 1944, por la limosna de
1350 pesetas. (Cedida para la exposición por la Hermandad de la Vera Cruz de
Olivares)
Detalle del rostro
Detalle de los pies
Detalle del pie derecho
Imagen de San Juan Evangelista. Antonio Bidón. 1935
Detalle del rostro
Detalle del pie
La estancia de la Hermandad de la
Esperanza Macarena tras el incendio de San Gil, desde 1936 hasta 1942, en la
iglesia de la Anunciación, dio lugar a una vinculación muy estrecha entre ambas
Corporaciones que perdura hasta nuestros días.
Concesión de la Medalla de Oro de la Macarena
Gratitud de la Hermandad de la Macarena
Lienzo del pintor Chiappi bendecido en la tarde del
Martes Santo de 1954, para conmemorar la estancia de la Macarena en la
Anunciación. Hoy preside la sala Capitular de la Hermandad
En la mañana del Viernes Santo de 1928, sería la primera
vez que la Hermandad recibiría a la Macarena, a su paso por la iglesia de la
Anunciación, en su regreso de la Estación de Penitencia
En 1999 y dentro
de los actos del 75º aniversario fundacional de nuestra Hermandad, se produjo
la firma del hermanamiento en la iglesia de la Anunciación
A principio del año 1942 comienzan a hacerse gestiones
con el cura párroco de san Isidoro, para la adquisición de una Dolorosa que
había pertenecido a la hermandad extinguida del Desprendimiento de Cristo bajo
la advocación del Dulce Nombre. El primero de octubre del mismo año se concretaría
la entrega de la misma, siendo trasladada a la iglesia de la Anunciación donde
seria bendecida el 22 de noviembre siguiente por el cardenal D. Pedro Segura
El Pali viendo pasar la Hermandad