RUTAS POR SEVILLA: Santos y Santas
San Pascual Baylón.
Pascual
Baylón Yubero, nació en Torrehermosa (Zaragoza) el 16 de mayo de 1540, el día
de la Pascua de Pentecostés y, como era costumbre en las familias, se le puso
el nombre del santo del día.
Hijo de Martín Baylón e Isabel Yubera, fue el segundo
de los hermanos. La mayor era Juana, y después Francisco, Juan, Lucía y Ana.
Tuvo tres hermanos más del anterior matrimonio de su padre, pero murieron tan
jóvenes que no llegó a conocerlos
Pascual
se dedicó al pastoreo de las ovejas de su padre, y aprendió allí a leer y a
escribir de manera autodidacta con la ayuda de la Biblia.
A partir de los siete hasta los veinte vivió en
Alconchel de Ariza (Zaragosa), como pastor del rebaño de Martín García, un
vecino del pueblo.
Posteriormente le salió la proposición de pastorear
el ganado del señor Aparicio Martínez en Monforte del Cid (Alicante) durante dos años y después pasó a Elche, a las órdenes del dueño del ganado Bartolomé Ortiz
y también trabajo como pastor del ganadero Osa de Alarcón en Almansa.
En la pedanía de Orito (Monforte
del Cid), Pascual tuvo una visión de Jesus Cristo en la Eucaristía, en la
conocida “Ermita de la Aparición”, tras lo cual, a los 24 años, pidió ingresar
en la orden franciscana, en el convento de Nuestra Señora de Orito, famoso por
la sencillez de los religiosos franciscanos que lo habitaban y al principio le negaron la aceptación por su poca
instrucción, pues apenas había aprendido a leer.
Tomó los hábitos en 1564, en el
convento de Elche de San José y profesó en Orito el 2 de febrero de 1565.
Como religioso franciscano sus oficios fueron siempre
los más humildes: portero, cocinero, mandadero, barrendero, limosnero. Pero su
gran especialidad fue siempre un amor inmenso a Jesús en la Eucaristía, defendiéndola de los ataques de los protestantes
hugonotes cuando cruzó Francia como mensajero del provincial de su orden.
Entre los milagros que se le atribuyen destacan la
multiplicación del pan para los pobres, la curación de enfermos, el don de profecía
y el que narra cómo de una piedra salió agua para unos pobres.
La tradición popular afirma que muchas veces orando
experimentaba tanta alegría que se ponía a bailar y por eso el apodo de
“bailon”, pero realmente Baylon era el apellido de su padre.
Falleció el 17 de mayo de 1592, fiesta de Pentecostés,
a los 52 años, y la leyenda cuenta
que, tras su muerte, durante la Misa de Requisen, en el momento de la
consagración, abrió los ojos para adorar al Santísimo Sacramento.
Fue beatificado por el papa Paulo V el 19 de
octubre de 1618 y canonizado por Alejandro VIII el 16 de octubre de
1690. Declarado patrono de todas las asociaciones y congresos eucarísticos
por el papa León XIII el 28 de noviembre de 1897.
El rey
de España Carlos II estableció en 1681 su patronato regio sobre la
capilla de Villarreal donde reposaban los restos del santo. Y el rey Juan
Carlos I, el 17 de mayo de 1992, festividad de san Pascual Bailón y IV
centenario de su muerte, reinauguró dicha Real Capilla y presidió el traslado
de los restos del santo a su nuevo sepulcro, obra del escultor Vicente Lloréns
Poy.
Estos
restos son la parte que sobrevivió al incendio de la basílica durante
la Guerra Civil, pues ciudadanos de Villarreal, para proteger las cenizas las
trasladando a sus casas y algunos se quedaron pequeñas partes de las mismas por
lo que no se han recuperado en su totalidad.
Todos los años, en los días anteriores al 17 de mayo se
viene celebrando en Orito la tradicional Romería de san Pascual, que tiene como punto de llegada el
santuario sito en la montaña conocido como Cueva de san Pascual, en el mismo término de Orito.
Iglesia de San Antonio de Padua (ver)
