AREA DE SAN ANDRÉS
Hermandad de los Panaderos. Capilla de San Andrés.
El
nombre oficial de la corporación es Pontificia, Real, Ilustre y Fervorosa
Hermandad y Archicofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Soberano
Poder en su Prendimiento, María Santísima de Regla Coronada y San Andrés
Apóstol.
La actualización
de la historia de la hermandad se debe a José Roda Peña, historiador y hermano
de la hermandad que ha publicado el libro “La Hermandad del Prendimiento en los
siglos XVII y VXIII”
Los “censos”,
como los establecidos por el cardenal Niño de Guevara, así como la aprobación
de reglas, han sido tomados en la mayoría de las ocasiones como guía para
establecer el año de fundación de una corporación penitencial, pero ello no es
óbice para que las mismas ya existieran anteriormente a esta formalización.
Así, las
primeras reglas conocidas de la corporación fueron aprobadas el 3 de febrero de
1601, por parte del provisor Don Luciano de Negrón, al estar vacante la sede
arzobispal de Sevilla. Pero no se sabe
con seguridad el año de fundación de la hermandad y es probable que ya
existiese antes de que se aprobaran las mismas. Aunque existe constancia de la
existencia de una cofradía de la Virgen de Regla establecida en 1586 en el
convento del Espíritu Santo de Triana no se puede aseverar que se trate de la
misma corporación.
Un hecho
documentado es que la cofradía de Nuestra Señora de Regla se encontraba
establecida en la iglesia de San Pedro en el año 1611, en donde continuaba en
1623 para, según Félix González de León, trasladarse a Santa Lucía, donde tendría
lugar la fundación de la hermandad, según José Bermejo y Carballo (“Glorias religiosas de Sevilla”. 1882).
Desde 1640 la
hermandad se instala en Santa Lucia, en capilla propia situada en el lado del
Evangelio, edificada bajo la dirección de Francisco de Chaves.
En 1642 se
contrató el retablo que presidiría la capilla con el maestro Matías Fernández
Cardoso, y el imaginero Jacinto Pimentel
En 1692, se fusiona con hermandad de la Virgen de Regla,
conocida como de los “Panaderos”, por incluir a numerosos miembros de este
gremio.
En 1732 se
edifica una nueva capilla sobre la ya existente, obra llevada a cabo por el
maestro arquitecto José Fernando de Medinilla y por el escultor Bartolomé
García de Santiago.
En 1826 se
aprueban unas nuevas Ordenanzas por el Real y Supremo Consejo de Castilla y se
toman como titulares a la Virgen Santísima de Regla y al Santísimo y Sagrado
Poder de Nuestro Redentor Jesucristo. Y se establecen las condiciones que
debían cumplir los que quisieran ingresar como hermanos, de tal manera que tenía
que ser “gente de bien”, por lo que no podían ser negros, mulatos ni moriscos y
se aceptaba el ingreso de mujeres.
Durante la revolución
“Gloriosa” de 1868 (ver), el retablo
fue expoliado y terminó en la parroquia de la Asunción de Espartinas en 1870, y
la parroquia de Santa Lucía fue cerrada al culto, por lo que la hermandad se
trasladó al convento de la Consolación (actual iglesia de los Terceros) y posteriormente
a la iglesia de San Marcos, e incluso
llegó a residir tanto en San Román (1895) como en Santa Marina (1896).
En 1896, esta hermandad de los “Panaderos” se
fusiona a la de los alarifes de San Andrés, que
contaban con capilla propia en la calle Quebrantahuesos (actual Orfila) (ver) y desde
entonces, la corporación ha mantenido dicha sede, debiendo abandonarla solo de
manera temporal por obras o reformas.
En 1945, sustituyó la imagen titular del Señor, por
lo que afrontó una modificación considerable del paso de misterio, que consta
de dos soldados romanos, acompañados por Judas y dos sayones que portan una tea
y una soga, prenden a Jesús. Completan la escena San Juan, San Pedro y
Santiago. Remata el paso un olivo. En el segundo paso es la Dolorosa Virgen de
Regla bajo palio.
En 1950, el gremio de los panaderos nombra a la Virgen de Regla como su patrona. Desde entonces porta en su mano izquierda una espiga de plata sobredorada que hace alusión a dicho nombramiento