domingo, 1 de septiembre de 2024

 AREA DE SAN ANDRÉS

Hermandad de los Panaderos. Capilla de San Andrés. 

El nombre oficial de la corporación es Pontificia, Real, Ilustre y Fervorosa Hermandad y Archicofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder en su Prendimiento, María Santísima de Regla Coronada y San Andrés Apóstol. 

La actualización de la historia de la hermandad se debe a José Roda Peña, historiador y hermano de la hermandad que ha publicado el libro “La Hermandad del Prendimiento en los siglos XVII y VXIII”

Los “censos”, como los establecidos por el cardenal Niño de Guevara, así como la aprobación de reglas, han sido tomados en la mayoría de las ocasiones como guía para establecer el año de fundación de una corporación penitencial, pero ello no es óbice para que las mismas ya existieran anteriormente a esta formalización.

Así, las primeras reglas conocidas de la corporación fueron aprobadas el 3 de febrero de 1601, por parte del provisor Don Luciano de Negrón, al estar vacante la sede arzobispal de Sevilla.  Pero no se sabe con seguridad el año de fundación de la hermandad y es probable que ya existiese antes de que se aprobaran las mismas. Aunque existe constancia de la existencia de una cofradía de la Virgen de Regla establecida en 1586 en el convento del Espíritu Santo de Triana no se puede aseverar que se trate de la misma corporación.

Un hecho documentado es que la cofradía de Nuestra Señora de Regla se encontraba establecida en la iglesia de San Pedro en el año 1611, en donde continuaba en 1623 para, según Félix González de León, trasladarse a Santa Lucía, donde tendría lugar la fundación de la hermandad, según José Bermejo y Carballo (“Glorias religiosas de Sevilla”. 1882).

Desde 1640 la hermandad se instala en Santa Lucia, en capilla propia situada en el lado del Evangelio, edificada bajo la dirección de Francisco de Chaves.

En 1642 se contrató el retablo que presidiría la capilla con el maestro Matías Fernández Cardoso, y el imaginero Jacinto Pimentel

En 1692, se fusiona con hermandad de la Virgen de Regla, conocida como de los “Panaderos”, por incluir a numerosos miembros de este gremio. 

En 1732 se edifica una nueva capilla sobre la ya existente, obra llevada a cabo por el maestro arquitecto José Fernando de Medinilla y por el escultor Bartolomé García de Santiago.

En 1826 se aprueban unas nuevas Ordenanzas por el Real y Supremo Consejo de Castilla y se toman como titulares a la Virgen Santísima de Regla y al Santísimo y Sagrado Poder de Nuestro Redentor Jesucristo. Y se establecen las condiciones que debían cumplir los que quisieran ingresar como hermanos, de tal manera que tenía que ser “gente de bien”, por lo que no podían ser negros, mulatos ni moriscos y se aceptaba el ingreso de mujeres.

Durante la revolución “Gloriosa” de 1868 (ver), el retablo fue expoliado y terminó en la parroquia de la Asunción de Espartinas en 1870, y la parroquia de Santa Lucía fue cerrada al culto, por lo que la hermandad se trasladó al convento de la Consolación (actual iglesia de los Terceros) y posteriormente a la iglesia de  San Marcos, e incluso llegó a residir tanto en San Román (1895) como en Santa Marina (1896).

En 1896, esta hermandad de los “Panaderos”  se fusiona a la de los alarifes de San Andrés, que contaban con capilla propia en la calle Quebrantahuesos (actual Orfila) (ver) y desde entonces, la corporación ha mantenido dicha sede, debiendo abandonarla solo de manera temporal por obras o reformas.

En 1945, sustituyó la imagen titular del Señor, por lo que afrontó una modificación considerable del paso de misterio, que consta de dos soldados romanos, acompañados por Judas y dos sayones que portan una tea y una soga, prenden a Jesús. Completan la escena San Juan, San Pedro y Santiago. Remata el paso un olivo. En el segundo paso es la Dolorosa Virgen de Regla bajo palio.

En 1950, el gremio de los panaderos nombra a la Virgen de Regla como su patrona. Desde entonces porta en su mano izquierda una espiga de plata sobredorada que hace alusión a dicho nombramiento