jueves, 24 de agosto de 2023

 RUTAS POR SEVILLA: Vírgenes

Virgen de la Soledad de san Lorenzo.

La Virgen de la Soledad, situada en el camarín central, es considerada como talla anónima y como la dolorosa más antigua de Sevilla, pues no se sabe con exactitud su fecha de realización, habiendo quien la data a finales del siglo XVI.

Pero, muy recientemente, es atribuida al genovés Jácomo Verlardi y al cordobés Andrés de Castillejo, y es lo único que se conserva desde la fundación de la Hermandad, a mediados del siglo XVI.

Se trata de una imagen de candelero, aunque se considera que en sus orígenes fue escultura de talla.

Sobre 1568 o bien posteriormente, pero sin saber con seguridad fue mutilada para la colocación de un candelero y brazos articulares, para poder ser vestida más cómodamente. 

La Virgen lleva diadema de oro de ley, hecha en 1978 por Jesús Domínguez Vázquez, orfebrería Villareal y joyería Casa Ruiz. Oro de ley y pedrería. Oro donado por los devotos. Reproduce el mismo díselo de la de 1945, aunque de aspecto y dimensiones mayores.

La saya está bordada en el siglo XIX (1885). No está documentada su autoría, que puede ser de la órbita de José Antúnez o Teresa del Castilla. Los bordados fueron pasados a nuevo soporte de terciopelo en 1895 por Charo Bernardino. Terciopelo negro bordado en hilo de oro a realce.

El manto es de terciopelo negro, bordado en oro en 1875.  

El Puñal es de 1996 de Jesús Domínguez Machuca. Oro de ley de 22 quilates en el anverso y de 18 en el reverso, siguiendo un dibujo basado en las diademas neobarrocas de la hermandad. En el engarzado colaboró Manuel Rueda y Dolores León , que ejecutó el sol central de marfil. Lleva unos 90 brillantes, y fue donada por un grupo de humanas, destacando la aportación de la pedrería de la pulsera de pedida de Soledad Murube, esposa del escritor Joaquín Romero Murube (ver).

En 1916 sufrió una intervención en la policromía por el pintor Carlos García Eiris y en 1953 y 1970 por el pintor Santiago Martínez Martin.  En 1985 el equipo formado por Juan Abad Gutiérrez, Silvia Patricia Martínez García-Otero y Joaquín Arquillo Torres fue restaurada por ultima vez.

 ALGUNAS LEYENDAS DE SEVILLA

La inmaculada de la Iglesia de san Lorenzo. 

En la nave de la epístola de la Iglesia de san Lorenzo encontramos el retablo de la Inmaculada  del siglo XVII (1630)   con la imagen de la titular, obra del siglo XIV, procedente del convento Casa Grande del Carmen (ver). 

En su construcción participaron Bartolomé de la Puerta, Blas de Castilla y Jacinto Pimentel. 

El altar está cubierto de azulejos procedentes de la escuela de Hernando de Valladares, en el siglo XVI.

Retablo e imagen de la Inmaculada

Detalle de los querubines en los pies de la Inmaculada. Crucifijo con los pies cruzados, el izquierdo sobre el derecho

Según cuenta la leyenda, esta Inmaculada, fue una de las imágenes que ocultaron los visigodos cuando los musulmanes invadieron la Península.

Se fundamenta en el hecho de que la efigie apareció en una cueva, al realizarse los cimientos para hacer la Capilla Mayor de la antigua iglesia del Carmen (ver), debajo de una campana, colocada posteriormente en la torre.