domingo, 19 de marzo de 2023

RUTAS POR SEVILLA: Santos y Santas Mártires 

Santa Justa y Rufina.

Calle Santa Justa

Justa y Rufina eran dos hermanas que vivían la Híspalis de finales del siglo III, bajo el dominio Romano, con Probo como Emperador y Diogeniano como Prefecto.  

Justa nació en el año 268 y Rufina en el 270. 

Pertenecían a una modesta familia de cristianos clandestinos, que se dedicaban al oficio de la alfarería, en el actual emplazamiento del barrio de Triana. 

Eran de gran generosidad y ayudaban a sus vecinos necesitados y a la enseñanza del Evangelio.

En el mes de julio se celebraban “Las fiestas de Venus”, en las que se rememoraba la muerte de Adonis. Un cortejo presidido por unas parihuelas portaba una imagen de la diosa Salambó, de origen babilónico, equivalente a Venus.  

Se pedía limosnas para los ídolos paganos y al pasar el cortejo por el taller de las hermanas, estas se negaron a dar dicha limosna, por tratarse de un rito pagano contrario a su fe cristina

Algunos de los paganos celebrantes, en respuesta, rompieron piezas cerámicas de la tienda y las hermanas empujaron las parihuelas con lo que se rompió el ídolo o imagen de la diosa Salambó.

El Prefecto se Sevilla, Diogeniano, mando encarcelarlas para que renegaran de la fe cristiana, pero las hermanas se negaron y fueron torturadas, con el potro o con garfios de hierro o privándolas de comida y bebida.  

Según la tradición, estas mazmorras coinciden con las galerías subterráneas del Colegio Salesiano de la Santísima Trinidad, llamadas “Sagradas Cárceles”, donde se conserva una columna de mármol, con una cruz tallada de unos 19 cm., que habrían hecho las hermanas, con sus uñas, durante su encarcelamiento.   

Patio de la Iglesia de la Trinidad

Entrada a las Sagradas Cárceles

Interior de las Sagradas Carceles

Columna de mármol en el interior

Dado que no renunciaban a su fe, se las castigó a ir caminando descalzas hasta la Sierra Morena, y al conseguir sobrevivir fueron nuevamente encarceladas hasta morir.

Justa muere el 17 de julio del año 287 y su cuerpo fue arrojado a un pozo, de donde lo recogió posteriormente el obispo Sabino, para darle cristiana sepultura.  

Dado que Rufina se mantuvo firme, sin renegar de sus creencias cristianas, Diogeniano ordenó que fuera conducida al anfiteatro para ser devorada por un león, pero este se limitó a lamer sus vestiduras y el Prefecto, finalmente, la mandó decapitar y quemar su cuerpo. 

El obispo Sabino recogió sus restos y los enterró junto a los de su hermana en el año 287, en el cementerio de los cristianos, que en Sevilla coincidía con el actual Convento de los Capuchinos de la Ronda, cuyo cenobio sigue manteniendo la titularidad de las santas.

Por su defensa de la religión cristiana, hasta su muerte cruenta, fueron objeto de la devoción popular y se las consideró santas. 

Durante la época visigoda, su culto se extendió por Sevilla donde tuvieron basílica y San Isidoro escribió un himno en su honor. 

El culto fue acrecentándose por la Bética como atestiguan las inscripciones, los oficios de los libros litúrgicos, los calendarios mozárabes y los templos y altares que se le fueron dedicando a lo largo de los tiempos, entre los que destaca el templo mozárabe de santa Justa en Toledo, levantado por los cristianos cordobeses perseguidos durante la ocupación musulmana, que se exiliaron a Toledo, y la iglesia y monasterio levantados sobre las cárceles de su martirio por el rey Fernando III el Santo.

Sus restos enterrados por el obispo Sabino en el cementerio cristiano de Sevilla, se trasladaron a la iglesia de san Jorge de Alcalá de los Gazules, junto con los restos de los Santos patronos de Cádiz. 

En el siglo XVIII, se llevaron a la iglesia de las Santas Justa y Rufina de Maluenda, que conserva dos reliquias, una parte de la canilla del brazo de santa Justa y una porción de la cabeza de santa Rufina.

Fueron elegidas como patronas del gremio de los olleros (ceramistas) cuando este se fundó en Triana en 1589.

Son copatronas de Sevilla y también patronas de Manises, Orihuela, Payo de Ojeda, Maluenda y Huete. 

En Francia son patronas de los alfareros en Montauban, y la iglesia de Prats de Molló está bajo su advocación. 

Su fiesta litúrgica se celebra en la Catedral de Sevilla el 17 de julio y participan en la procesión del Corpus Christie como el segundo de los pasos, en una escultura de Pedro Duque y Cornejo de 1728, procedente de la Iglesia Colegial del Divino Salvador.  

La iconografía las representan a los lados o abrazando a la Giralda, porque la tradición mantiene que así protegieron la caída de la Catedral durante el terremoto de Carmona de 1504. 

También se representa portando palmas como símbolo del martirio y con objetos de barro por su profesión de alfareras.

A veces se representa con el león lamiendo a Santa Rufina o con instrumentos de tortura.

Expresiones artísticas:

Iglesia de santa Ana de Sevilla. Maestro de Maguer. Escuela de Alejo Fernández. 1515.

Capilla de santa Justa y Rufina. Iglesia de santa Ana. Sevilla. Del segundo cuarto del siglo XVII, representa a las hermanas alfareras de Triana sosteniendo la Giralda por el terremoto de Carmona de 1504. El retablo esta flanqueado por San Francisco de Paula y Santa Teresa de Jesús


Catedral de Sevilla. Retablo de la capilla de los Evangelistas. Hernando de Esturmio. 1555.


Catedral de Sevilla. Miguel de Esquivel. 1620

Catedral de Sevilla. Miguel de Esquivel. 1620


Catedral de Sevilla. Pedro Duque Cornejo. 1728.

Altar de santa Justa y Rufina. Fue fundado en 1622 por los Caballeros Bécquer, cuyo escudo figura en la reja que cierra la capilla. En el altar figuran las esculturas de las Santas titulares flanqueando a la Giralda. Estas esculturas proceden de la iglesia del Salvador de Sevilla y fueron realizadas por Pedro Duque Cornejo en 1728


Catedral de Sevilla. Capilla de los Cálices. Goya. 1817.

Santas Justa y Rufina. Francisco de Goya. 1817. Capilla de los Cálices. Catedral de Sevilla

Catedral de Sevilla. Capilla de san Antonio de Padua. Vidriera de Juan Bautista León. 1685

Catedral de Sevilla. Capilla de san Antonio de Padua. Vidriera de Juan Bautista León. 1685


Catedral de Sevilla. Puerta de la Sacristía Mayor

Santa Justa y Rufina. Diego Guillén. 1547-1549. Puerta de la Sacristía Mayor de la Catedral

Iglesia del Divino Salvador de Sevilla. Jerónimo Hernández. 1586


Iglesia del Divino Salvador de Sevilla. Jerónimo Hernández. 1586

Museo de Bellas Artes de Sevilla. Cerámica de Hernando de valladares. 1600.

Museo de Bellas Artes de Sevilla. Cerámica de Hernando de Valladares. 1600.

Museo de Bellas Artes de Sevilla. Murillo. 1665-66.

Museo de Bellas Artes de Sevilla. Murillo. 1665-66.

Ayuntamiento de Sevilla. Juan de Espinal. 1760


Santa Justa y Rufina. Juan de Espinal. 1760.Óleo sobre lienzo. 1,68 x 2, 75 m. Ayuntamiento de Sevilla

Museo del Romanticismo. Antonio María Esquivel. 1844

Museo del Romanticismo. Antonio María Esquivel. 1844

Focus-Abengoa. Velázquez. 1629-1632

Focus-Abengoa. Velázquez. 1629-1632

Meadows Museum. Murillo. 1665

Meadows Museum. Murillo. 1665

National Gallery of Ireland. Zurbaran. 1635-1640.

National Gallery of Ireland. Zurbaran. 1635-1640.

Fitzwilliam Museum. Cambridge. Taller de Zurbaran.

Fitzwilliam Museum. Cambridge. Taller de Zurbaran.

Colección particular. Pacheco. 1616-18

Colección particular. Pacheco. 1616-18

José Gutiérrez de la Vega. 1846


Iglesia de santa Catalina. Capilla Sacramental. 



Santa Justa. Capilla Sacramental. Iglesia de santa Catalina


Santa Rufina. Capilla Sacramental. Iglesia de santa Catalina


Iglesia de san Gil





Iglesia de san Gil

Iglesia de Santa Ana

Retablo de San Juan Bautista

Remate del Retablo

Santa Justa

Santa Rufina

Iglesia de san Hermenegildo (Altar Mayor)


Iglesia de Capuchinos (Altar Mayor)


6 comentarios:

  1. Muy interesantes tus últimas historias. Impresionante la galería pictórica y escultórica sobre Justa y Rufina y su ruta por la ciudad. Tus narraciones se han convertido ya en una estpenda lectura de verano.
    ! Gracias y un abrazo!

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  2. Magnífico resumen pictórico y excelente complemento literario. Dejo a un lado a MENA y abrazo al amigo Andrés para que nos siga suministrando historias de esta Sevilla mágica.

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  3. Extraordinaria exposición de la historia de estas santas, tan entrañables para los sevillanos. Tiene mucho mérito tu trabajo de recopilación de tantas obras de arte inspiradas en ellas. Felicidades primo Andrés

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  4. Andres espectacular muestrario el que noscofrece

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  5. Me ha encantado el detalle de la capilla sacramental de Santa Catalina. Verla aislada del conjunto la revaloriza.
    Pablo

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