ALGUNOS PERSONAJES HISTÓRICOS EN LAS CALLES DE SEVILLA

Fernando Contreras. 

Calle Contreras (ver)

Fernando de Contreras nació en Cazalla de la Sierra (Sevilla) en el año 1470 o 1472 y fue bautizado en la Parroquia de San Gil.

Asistió al coro de la catedral de Sevilla, fue ordenado sacerdote a los dieciocho años y celebró su primera misa en la Capilla de la Virgen de la Antigua.

Fue un sacerdote de gran elocuencia y destaca la famosa predicación ante el Arzobispo Manrique de Lara, en la que llegó a contraponer la figura virtuosa de San Alfonso con el comportamiento del prelado hispalense.

Retrato del padre Fernando de Contreras. Garbado al aguafuerte y buril por Joseph según dibujo de Lucas Valdés para la obra de Gabriel de Aranda, “Vida del siervo de Dios”, exemplar de sacerdotes el venerable Padre Fernando de Contreras. En Sevilla, por Thomas López de Haro. 1692. Biblioteca Nacional de España

En 1511, el cardenal Cisneros (ver), uno de los grandes referentes de la Iglesia y la sociedad de su época, lo nombró capellán del Colegio Mayor de san Ildefonso de Alcalá de Henares, lo que le permitió estudiar teología y filosofía en su eminente Universidad y conocer a Juan de Ávila (ver).  

En 1516 pasó a Torrijos, en la provincia de Toledo, donde se dedicó a atender a pobres y enfermos, con la ayuda económica de Doña Teresa Enríquez (La Loca del Sacramento) (ver), y fundó un colegio en el que enseñaba gramática y canto.

En 1526 volvió a Sevilla y continuó dedicándose a la instrucción de niños pobres y sin recursos. 

Fernando Contreras. Copia anónima del siglo XVIII de la pintura de Luis Vargas de la Catedral de Sevilla. Óleo sobre lienzo. 104 x 82 cm. Casa Montpensier. Ayuntamiento de Sevilla

En 1527 alojó en su casa a Juan de Ávila a quien conoció en Alcalá de Henares.  Juan de Ávila llegó a Sevilla para partir hacia las Indias, pero Contreras habló de su proyecto con el arzobispo de Sevilla, Alonso Manrique, y este ordenó a Juan de Ávila que abandonará la idea de América y que evangelizará en Andalucía: “¡Sevilla será tus Indias!”, a lo que Juan se consagró plenamente y lo hizo merecedor de ser llamado "Apóstol de Andalucía". 

También, Contreras participaría del sufrimiento de su gran amigo cuando éste fue llevado ante el tribunal de la Inquisición por “predicaciones altamente sospechosas”. Finalmente, tras dos años de presidio, el maestro Ávila saldría indemne de una causa fundada en calumnias.

En 1532, Fernando Contreras realizó el primero de sus ocho viajes a territorios berberiscos en Argel, donde se entregó a la redención de cautivos, principalmente los niños y niñas, más expuestos que los adultos a múltiples vejaciones, ofreciéndose él mismo como rehén en una ocasión y regresando con muchos rescatados.

Consiguió del Arzobispo Alonso Manrique de Lara la creación del Colegio de San Isidoro, en la que se acogería a niños huérfanos, y compuso un catecismo sobre la doctrina cristiana orientada a estas edades.

En 1546 rechazó el obispado de Guadix para el que fue propuesto por el emperador Carlos V.

Falleció, el 17 de febrero de 1548, en el hospital de Santa Marta de Sevilla, donde pasó sus últimos días, y sus restos descansan en una zona privilegiada de la Catedral de Sevilla, entre el Altar Mayor y el Coro. 

Tumba del Venerable Fernando Contreras

Vázquez de Leca inició la causa de beatificación, y en 1786 se firmó en Roma el decreto confirmando las virtudes heroicas del padre Fernando de Contreras, pasando a la denominación de venerable.