martes, 28 de marzo de 2023

 AREA ALAMEDA

Iglesia de san Miguel.

La antigua parroquia de San Miguel ocupaba la manzana hoy delimitada por las calles Jesús del Gran Poder (antes Palmas), Aponte (hasta 1845 San Miguel), Trajano (antes Puerco) y plaza del Duque.

Plano de Olavides. 1771

Esta parroquia fue fundada en el siglo XIII, en la época fernandina (Anales de Ortiz de Zúñiga), y fue reconstruida durante el reinado de Pedro I de Castilla” el Cruel” o “el Justiciero”, tras el terremoto de 1356, por iniciativa del arzobispo de la ciudad don Nuño de Fuentes y la hacienda de don Martin Yáñez de aponte, señor de Chillas, alcaide de las atarazanas y tesorero mayor de Andalucía.

Fue gravemente afectada por el terremoto de Lisboa de 1755 y las obras de reparación se prolongaron entre 1755 y 1757.

A pesar de ser una de las parroquias más importantes de Sevilla, fue demolida en tiempos de la revolución conocida como La Gloriosa (1868) (ver).

Derribo de san Miguel en 1868. Fotografía Francisco Pérez Romero

Cabecera de la parroquia de San Miguel. Detalle de la procesión del Santo Entierro grande de 1854. Aguada anónima. 1854. Reales Alcázares de Sevilla


Derribo de la parroquia de san Miguel. Francisco Peralta. 1868.

Este movimiento político principió en Cádiz el 18 de septiembre de 1868 con el pronunciamiento de Prim y Topete, y al día siguiente triunfó en Sevilla y se extendió por toda España para derrocar a la reina Isabel II.

La Junta Revolucionaria de la Ciudad, en la que estaban, entre otros, don Manuel de la Puente y Pellón, don Federico Rubio, don Antonio Machado, don Federico de Castro y el Marqués de la Motilla, acordó el 6 de octubre la supresión de doce parroquias -entre las que estaba San Miguel- y veintitrés templos que no poseían tal rango. La Parroquia de San Miguel estaba incluida en esa lista y fue demolida pese a la firme oposición del canónigo don Francisco Mateos Gago, vocal de la Comisión Provincial de Monumentos Artísticos. Aunque, en 1871 quedaban restos de la vieja parroquial en el solar donde poco más tarde se levantó el Teatro del Duque.

Los pocos restos que se rescataron se encuentran esparcidos principalmente entre las iglesias de San Antonio Abad y La Magdalena, donde se guarda su importante archivo. De su interior, la actual reja que cierra la capilla de la Hermandad de la Soledad, en la parroquia de San Lorenzo, procede de San Miguel.

Se sabe que era un templo de estilo gótico-mudéjar, de piedra y ladrillo, que, en su exterior, contaba con tres puertas, dos laterales y otra a los pies del templo. En su interior tenía tres naves de longitud desigual y con la central de mayor anchura, que se cubrían con bóvedas de crucería, y un profundo presbiterio, que contó con dos retablos mayores sucesivos, uno realizado por Francisco Dionisio de Ribas en 1675, y otro de Juan de Astorga de 1829, cuya figura central constituía una talla del arcángel San Miguel realizada por Ribas, que actualmente pertenece a la cofradía del Silencio. 

Talla de san Miguel (1675-1679), obra de Francisco Dionisio de Ribas, que presidía el retablo mayor del templo

La Iglesia de San Miguel fue sede durante un tiempo de algunas importantes hermandades, así en la lista realizada en 1842 con carácter general en toda la Archidiócesis por orden del Gobernador del Arzobispado, figuran en activo en el templo de la plaza del Duque las del Amor (que había llegado a la parroquia en 1811 hasta 1868, procedente de la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación, vulgo "Los Terceros"), la Sacramental (fusionada con la de Nuestra Señora del Rosario y Animas), y Pasión (cuyo titular arribó en junio 1841 procedente de una casa particular tras haber sido cerrado un año antes el convento de la Merced, hoy Museo de Bellas Artes). Con las Reglas en paradero desconocido se citan en la lista las Hermandades de la Soledad, Santa Bárbara, Santa Ana y Vera Cruz.

1 comentario:

  1. Muchas gracias ANDRES por la aportación que nos haces con tus conocimientos sobre nuestra querida ciudad

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