lunes, 16 de octubre de 2023

 ALGUNOS PERSONAJES HISTÓRICOS EN LAS CALLES DE SEVILLA

Johne Downie y la "Leal Legión Extremeña".


John Downie (ver)

John Downie, era hijo segundón de una familia hidalga del condado de Stirling en la Escocia central. 

Su padre Benjamin Downie, era propietario en Blaigorts, y su madre Margarita Forrester, pertenecía a una familia de rancio abolengo que se preciaba de descender de Sir Duncan Forrester, quien fuera mayordomo de palacio del rey Jacobo IV de Escocia.

Nació en la casa solariega de Blaigorts el 28 de diciembre de 1777, pero como el sistema de primogenitura le excluía de heredar las propiedades de sus antepasados, tuvo que ganarse la vida por su cuenta, y en 1802 hizo fortuna en la isla caribeña de Trinidad, que en 1797 los británicos habían arrebatado a los españoles.  

Pero, el colapso de un banco le dejó de nuevo en la ruina y se unió a Francisco de Miranda en su intento fallido de provocar una insurrección contra el gobierno español de la Nueva Granada, en lo que ahora es Venezuela, teniendo que volver a las islas británicas. 

Retrato de John Downie. José María Halcón y Mendoza. 1819. Óleo sobre lienzo, 60 x 47 cm, Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Donado a la Academia por su autor para ser admitido como académico de mérito. (ver)

Sir Thomas Picton le recomendó ingresar en el ejército inglés, donde sirvió a las órdenes de Sir John Moore, al comienzo de la Guerra de la Independencia en España, donde el Reino Unido ayudaba a España en su lucha contra las tropas napoleónicas.


En 1810, el aventurero y militar volvió a Extremadura como oficial de intendencia de los Dragones Ligeros, uno de los regimientos británicos, luchando bajo Arthur Wellesley, el futuro Duque de Wellington, contra los ejércitos de Napoleón, con valentía en Talavera de la Reina y Badajoz.

Arthur Wellesley, I duque de Wellington. Pintado por Thomas Lawrence, meses antes de la batalla de Waterloo. (ver)

El 22 de julio de 1810, el Consejo español de Regencia (en Cádiz) autorizó a Downie a crear la “Leal Legión Extremeña”, con la mediación del marques de la Romana, mencionando su comprobada valentía en la evacuación de Badajoz, y de la que fue nombrado coronel, ascendiendo a brigadier el 10 de abril de 1812.

Esta legión era un ejército particular de 3000 extremeños voluntarios, pero que no eran mercenarios ni guerrilleros, sino soldados regulares luchando en un cuerpo del ejército organizado de forma privada, pero reconocido de manera oficial.  

Tenían la particularidad de que vestían a la antigua usanza española, con sombrero de ala volteada, calzas, jubón, y ropa de color blanco y rojo, con bonete y capa corta.

En 1810 el Marqués de la Conquista, descendiente directo de Francisco Pizarro, le confió la espada del conquistador del Perú, por su empeño en liberar a España del yugo napoleónico.  Esta espada sería utilizada en todos sus combates y actualmente se conserva en la Real Armería de Madrid, en el Palacio Real de Madrid.

Espada de Pizarro. Aunque su propietario le pidió a Downie que se la devolviera, él volvió a usarla en la Guerras Realista de 1822. Actualmente se conserva en la Armería real de Madrid. (ver)

En 1811 consigue una victoria en la batalla de Arroyomolinos a pesar de contar con inferioridad de fuerzas, logrando hacer 200 prisioneros franceses. 

El 5 de abril de 1812 logra una victoria en la batalla de Espartinas   que le vale su ya citado ascenso a brigadier el 10 de abril de 1812. 

Al regresar a Cádiz, pasa a las filas del mariscal de campo Juan de la Cruz Mourgeon, con quien tomaría Sanlúcar de Barrameda ​ y con quien se dirigiría posteriormente a Sevilla, pasando por Castilleja de la Cuesta.

Juan de la Cruz Mourgeon y Achet. (ver)

La participación de la “Legión Extremeña” fue decisiva en la victoria de la “Batalla del Puente de Triana” (ver) que permitió la liberación de la ciudad de Sevilla. 

En esta batalla fue herido en el ojo y en la mejilla y fue capturado, aunque antes arrojó la espada de Pizarro a la Legión Extremeña, para evitar que cayera en manos de los enemigos.

Posteriormente fue liberado al ser canjeado, por Wellington, por 190 prisioneros franceses, aunque perdió un ojo en la reyerta.

Glasgow le concedió la libertad de la ciudad y el Príncipe Regente (el futuro Jorge IV) le creó caballero, mientras en España en 1816 fue recompensado con el puesto de Teniente de Alcaide del Alcázar de Sevilla, con residencia en el Patio de Banderas del palacio. El once de julio de 1819, Downie fue admitido como miembro de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid, la institución más prestigiosa del mundo de las artes en España.

Fernando VII le nombró Caballero de la Orden de Carlos III, y la Regencia le hizo Caballero Gran Cruz de la Orden de San Fernando. Downie aceptó la nacionalidad española, abrazó la fe católica con gran devoción y es recordado en la historia española como el Mariscal de Campo John Downie.  

De 1820 a 1823 tiene lugar en España el Trienio Liberal (ver), en el cual los partidarios del liberalismo se enfrentan a los monárquicos absolutistas. John Downie era absolutista y partidario de Fernando VII por lo que fue arrestado y llevado al castillo de Santa Catalina   en Cádiz, siendo liberado en 1823, por Fernando VII, con la llegada de la Segunda Restauración, y murió en Sevilla el 5 de junio de 1826.

1 comentario:

  1. Someramente conocía la existencia del personaje. Te agradezco tu relato lo que me hará profundizar, en esta parte de nuestra Historia.

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